Se necesita inteligencia emocional para lograr escuelas más seguras
15 de marzo de 2023 - Una reciente investigación internacional de la Universidad de Córdoba y el proyecto europeo BOOST demostró que cuando las escuelas se centran en garantizar un clima escolar más seguro, esto también aumenta la inteligencia emocional de los estudiantes. Aunque el estudio no entró específicamente en la no discriminación, es probable que los programas antidiscriminación centrados en LGBTIQ+ también deban centrarse en el desarrollo de la inteligencia emocional.
Inteligencia emocional
La inteligencia emocional se define como la capacidad de gestionar eficazmente las emociones. Se define como un sistema de habilidades mentales para acceder, percibir, comprender, regular y procesar emociones para promover la resolución de problemas en áreas relacionadas con el afecto de un individuo. Se puede medir preguntando a los alumnos (1) si prestan atención a las emociones (Suelo prestar mucha atención a lo que siento); (2) sobre la claridad de sus sentimientos (Siempre puedo explicar cómo me siento); y (3) si son capaces de gestionar sus emociones ( esto se llama reparación del estado de ánimo) (Cuando estoy enfadado intento cambiar mi estado de ánimo). La inteligencia emocional tiene un claro impacto en el bienestar de los escolares. Un gran número de estudios ha demostrado cómo la inteligencia emocional influye en variables psicológicas y contextuales, pero se sabe menos sobre cómo los contextos escolares influyen en el desarrollo emocional.
Clima escolar seguro
El clima escolar se define como un "patrón de la experiencia de los alumnos, los padres y el personal escolar en la vida escolar que refleja normas, objetivos, valores, relaciones interpersonales, prácticas de enseñanza y aprendizaje y estructuras organizativas" (Cohen et al., 2009, p. 182). Cohen et al identificaron cuatro dimensiones del clima escolar: seguridad, relaciones, enseñanza y aprendizaje, y entorno institucional. El clima escolar puede medirse preguntando a los alumnos por cuatro factores: (1) Relaciones profesor-alumno (Los profesores se preocupan por sus alumnos); (2) Relaciones alumno-alumno (Los alumnos son amables con la mayoría de los demás alumnos); (3) Gusto por el colegio (Me gusta este colegio); y (4) Imparcialidad de las normas del colegio (Las consecuencias de infringir las normas del colegio son justas). Cuando los alumnos responden sistemáticamente a estas preguntas de forma positiva, se obtiene una visión fiable de un clima escolar seguro. Las estrategias para fomentar un clima escolar positivo pueden contribuir a que los alumnos aprendan a interiorizar las emociones negativas que experimentan, analicen por qué sienten esas emociones negativas y mejoren sus habilidades sociales y su inteligencia emocional.
El estudio
El estudio BOOST analizó el nivel de inteligencia emocional y clima escolar de escolares de educación primaria en España, Polonia y Noruega. Las niñas mostraron niveles más altos de reparación emocional en comparación con los niños. La reparación emocional y la claridad de las emociones fueron los factores más importantes de la inteligencia emocional.
El análisis multivariante mostró que los niveles más altos de inteligencia emocional en los escolares españoles estaban relacionados con un nivel correspondiente más alto de clima escolar. Los investigadores sugieren que la creación de un clima escolar más seguro puede conducir al desarrollo de una mayor inteligencia emocional. Sin embargo, estudios anteriores también mostraron una correlación en la otra dirección: los alumnos a los que se orienta para que desarrollen niveles más altos de inteligencia emocional contribuyen a un clima escolar más seguro.
Aunque este estudio se realizó entre alumnos de primaria, es probable que se observen las mismas tendencias en los centros de secundaria y formación profesional.
Relevancia para la diversidad sexual y de género
Los programas educativos diseñados para combatir la discriminación relacionada con la diversidad sexual y de género suelen centrarse en dar información sobre el colectivo LGBTIQ+ y en corregir los prejuicios. Sin embargo, en la práctica, la forma más eficaz de combatir la intolerancia hacia la diversidad sexual y de género es centrarse en las emociones y en cómo los estudiantes pueden hacer frente a los sentimientos negativos que experimentan cuando se enfrentan a alguien que es diferente a ellos. Por esta razón, sería importante que se desarrollaran programas actualizados para crear una mayor aceptación de las personas LGBTIQ+ centrándose más en la inteligencia emocional. Dichos programas podrían centrarse especialmente en cómo los alumnos pueden participar en la reparación del estado de ánimo. También es importante que la escuela preste atención al contexto de aumentar la inteligencia emocional proporcionando un clima escolar más seguro e inclusivo para las personas LGBTIQ+. A su vez, este clima escolar más seguro aumentará la inteligencia emocional de los estudiantes, incluida su capacidad para hacer frente a los sentimientos negativos hacia las minorías.
En el proyecto europeo #UNIQUE, este enfoque es líder. Este proyecto se centra en la formación profesional y se ha desarrollado un curso en línea para profesores de centros escolares de Chipre, Grecia, Croacia y Polonia. Los responsables del proyecto han recibido formación sobre un enfoque más emocional de la lucha contra la homofobia y la transfobia, y el curso en línea apoya esta perspectiva.
Peter Dankmeijer